jueves, 30 de noviembre de 2017

Infinita es la noche

Introducción


El pasado nos acecha y nos alcanzará cuando menos lo imaginemos.



Un evento importante se llevará a cabo en la ciudad de Nueva York, Gemma, Karyme y Celeste están inmersas en los preparativos para la boda de Erika y Vladimir, sin imaginar lo que sucederá después.


Antes de esto Celeste conoce a un apuesto hombre con el que traba una gran amistad, todos desconfían de él porque guarda un gran secreto del que ni siquiera tiene conocimiento, el gran acercamiento que tiene con Celeste despertará los celos de Axel, ocasionando conflictos.

Más sin embargo, es otro el interés de este caballero, nadie hubiera imaginado que sería de ese modo, a excepción de una persona, así estaba escrito que sucediera, suscitando de esta forma la revelación de una antigua profecía, la familia se dividirá porque algunos estarán en contra de que se cumpla. 











 

miércoles, 29 de noviembre de 2017

Crónica de una condena (Flor de Luna)



COMPROMISO



Ciudad de México, Miércoles 29 de Agosto 2012

12:30 am



Al día siguiente del ritual de Litha, dimos un paseo por un prado cercano a los acantilados de Moher, el escenario para lo que sucedería a continuación no podía ser más perfecto.



Toda la noche había estado dándome vueltas en la cabeza como empezar, mentira, ¿a quién engaño?, llevaba meses maquinando este momento. Haciendo un recuento de mi vida amorosa: había sido amante, esposa, viuda.Duré mucho tiempo soltera con algunas relaciones casuales, nada que tuviera alguna sensación de permanencia; pero, acaso, ¿algo en este mundo realmente lo es?



Entonces llegó Gauthier, por primera vez tanto en mi  existencia humana como inmortal me había enamorado; y para colmo, de alguien de mi misma condición pero de una naturaleza tan cambiante que podía ser duro y frío; por otro lado, muy tempestivo, una vez terminada la sofocante pasión inicial, tuve que comprender que tenía que seguir mi camino sin él o acabaría emocionalmente devastada.



  
Más sin embargo, esa relación me trajo lo que ahora tengo, esa anterior tormenta me trasladó a un remanso de paz, conocí a Miranda MacDowell, a pesar de representar esa calma, tuvimos nuestras propias tempestades, separaciones que dolieron, indecisiones, la mayoría fueron por mi causa pero siempre estuvo y ha estado ahí, fue cuando por fin supe como iniciar, la miré a los ojos:


-      Ya que estamos en tu país, quiero recordar una leyenda-.

-      ¿Cuál?, alguna que no conozco, no lo creo-.

-      Es una historia que tiene varias versiones, cualquiera sería la adecuada en este instante-.

-      Sorpréndeme-.



-      Hace 300 años un irlandés llamado Richard Joyce de la bahía de Galway emigró a las Indias Orientales con el propósito de hacerse de una buena cantidad de dinero para casarse con su prometida pero el barco fue capturado y él, vendido como esclavo a un orfebre musulmán en Argelia, cuando el rey Guillermo III ascendió al trono ordenó la pronta liberación de prisioneros británicos, quedando Joyce en libertad, el orfebre le ofreció la mitad de su fortuna y la mano de su hija ya que le había tomado aprecio pero él decidió volver a su hogar para casarse con su prometida, quién tras 14 años seguía esperándolo y así diseñó un anillo como símbolo de su amor-.



-      El anillo de Claddagh-.



-      Asi es, hay otra: Margareth Joyce, quien pertenecio al clan Joyce Galway, con la herencia que le dejara su primer esposo, financió la construcción de puentes en dicha localidad, en recompensa a su caridad, un águila dejó caer sobre su regazo dicha sortija-.



-      Hermosas leyendas, pero ¿A dónde nos llevan?-.



-      La que sigue seguramente la conoces mejor que yo, tiene que ver con la cultura de la que eres originaria; Dagda, dios del Sol se enamoró de Anu, la diosa del firmamento y madre de los celtas. De su amor nace Beathauile (la humanidad) de ese amor se crea el anillo de Claddagh, la simbología de la mano derecha es de Dagda, la izquierda de Anu y el corazón la vida que nació de la unión-.



-      Ésta y la primera son mis favoritas pero sigo sin entender-.



-      Quería que fuera lo más simbolico posible y no hallé algo más adecuado para decirte: con mis manos te doy mi corazón, y lo corono con mi amor, ¿te quieres casar conmigo?-.





Acto seguido saqué la cajita de terciopelo negro, ahí estaba el anillo en todo su esplendor: la corona rodeada de pequeños diamantes sobre las manos unidas sosteniendo un corazón de esmeralda diseñado en oro blanco. Los ojos de Miranda a pesar de ser intensamente oscuros parecían iluminados.



-      Sí que me has sorprendido pero yo no tengo nada que darte-.

-      Ya lo has hecho-.

-      Acepto, en lo que hayas decido hacer con respecto a Gauthier te ayudaré, también se lo debo-.

-      No hablemos de ese tema ahora-.





Le coloqué la sortija en el dedo anular de la mano izquierda con el corazón apuntado al exterior en señal de compromiso y permanecimos ahí contemplando el atardecer, fue cuando le pregunté:



-      ¿Empezarías por vivir conmigo?-.

-      Prácticamente soy una nómada virtual, no es problema, me gusta México para residir de forma más permanente-.

-      Y si lo deseas, te podría conseguir una cátedra-.

-      Hace tiempo que no doy clases, sería interesante-.

-      Te gustaría que nos casáramos primero, ¿en México o Nueva York?-

-      Ya lo decidiremos-.



Había muchos cambios por venir que conllevarían diversos trámites; pero tenemos tiempo de sobra.
















sábado, 25 de noviembre de 2017

Noche en vela (Una mínima esperanza)



 Último fragmento de la novela de Yamilet, "En el frío de la noche..."


“Aún sigo aguardando una noche eterna, sólo espero que no tengan que transcurrir muchos años porque tal vez será demasiado tarde, éstos no pasan en balde, será muy notoria la diferencia, deseo que no llegué en el otoño ni en el invierno de mi existencia; o tal vez, como él me lo advirtió, esta forma de vida no sea para mí, yo creo lo contrario, mi espíritu siempre ha sido sombrío y reservado, tengo la plena seguridad de que no me costaría gran esfuerzo adaptarme, noche eterna sigo esperándote, el mayor anhelo de mi corazón en este momento es que me cobijes con tu gélido abrazo”.






miércoles, 22 de noviembre de 2017

Angustia nocturna...





 “Una nueva corazonada me persigue, sólo que en esta ocasión no tengo la menor idea de lo que podría ser, quizá otro peligro esté acechándome, esperando a que me distraiga para encajarme sus garras en la yugular, dispuesto a destrozarme sin ninguna compasión, probablemente esas pesadillas regresen a mi subconsciente para advertirme, no me importaría despertar alterada en medio de la noche, estaría completamente dispuesta a tener otra madrugada febril”.                                                                               



El haber hecho esto me calmó un poco, cerré el cuadernillo, apagué la luz, subí a mi recámara, mi ventana estaba abierta, me pareció raro porque la había dejado cerrada con seguro, antes de repetir el procedimiento no pude evitar asomarme, en ese instante escuché un aullido aterrador que me estremeció y que casi me congeló las entrañas, me acosté y abracé con fuerza a Jorge Luis, definitivamente me convencí de que ese alarido era la señal de que la tempestad estaba por aproximarse, sea lo que sea estaré esperándola, la enfrentaré aunque pierda la vida en ello.